Confirmado: nuevas pruebas muestran que el COVID se creó en un laboratorio chino

Un informe revelado esta semana confirma que el COVID-19 fue creado en un laboratorio chino y no surgió de forma natural, como se intentó instalar al inicio de la pandemia. Además, se identificó a quiénes financiaron las investigaciones que derivaron en el virus.
Según documentos oficiales, el Instituto de Virología de Wuhan llevó adelante experimentos de ganancia de función (manipulación genética de virus para hacerlos más peligrosos) con fondos provenientes del gobierno de Estados Unidos, canalizados a través de la organización EcoHealth Alliance.
La investigación expone que científicos chinos, en colaboración con organismos norteamericanos, manipularon coronavirus de murciélagos para hacerlos más transmisibles a humanos. El proyecto era conocido y monitoreado, pero nunca fue debidamente controlado.
Estos datos derriban definitivamente la narrativa de que el virus surgió de un “mercado húmedo” y reinstalan la teoría del origen en laboratorio como la explicación más sólida del estallido de la pandemia que paralizó al mundo en 2020.
El escándalo crece y promete consecuencias políticas y judiciales a nivel internacional, ya que implica responsabilidades compartidas entre China y altos funcionarios de EE.UU.