FRANCOS LE PIDIÓ UNA REUNIÓN A MILEI EN MEDIO DE EXPECTATIVA POR LOS CAMBIOS EN EL GABINETE.
UN GABINETE EN REVISIÓN
A una semana de las elecciones, el Gobierno nacional atraviesa horas de definiciones. Francos pidió reunirse con el Presidente para repasar la agenda política y analizar los ajustes que Milei planea realizar en su equipo de ministros.
Fuentes oficiales señalaron que el encuentro se concretará en las próximas horas y que el objetivo es “ordenar responsabilidades” de cara a la nueva etapa de reformas.
En la Rosada admiten que Milei evalúa una reconfiguración interna, centrada en el fortalecimiento de áreas clave como Economía, Infraestructura y Coordinación General.
QUIÉNES SIGUEN Y QUIÉNES PODRÍAN SALIR
La victoria electoral reforzó el liderazgo del Presidente, pero también abrió espacio para un reordenamiento político.
Entre los nombres en revisión figuran algunos ministros que integraron listas o quedaron expuestos durante la campaña. Otros —como Federico Sturzenegger y Luis Caputo— aparecen consolidados en el nuevo esquema, mientras se analiza el futuro de Mariano Cúneo Libarona (Justicia) y de algunos secretarios de segunda línea.
El propio Francos fue claro días atrás: “Los gobiernos tienen etapas, y esta que empieza requiere nuevas energías”.
EL MENSAJE DE MILEI
El Presidente dejó trascender que busca “un gabinete más compacto, técnico y enfocado en resultados”.
Milei pretende imprimir mayor velocidad a las reformas estructurales, con especial énfasis en el mercado laboral, la desregulación estatal y la apertura económica.
Fuentes cercanas al mandatario señalan que la prioridad será reforzar la gestión y la comunicación, evitando filtraciones y disputas internas.
UNA REUNIÓN QUE DEFINE EL RUMBO
La cita entre Milei y Francos servirá para trazar el mapa político de los próximos meses.
El jefe de Gabinete —una de las figuras más equilibradas del oficialismo— busca garantizar la continuidad del diálogo con los gobernadores y consolidar la “Mesa Federal”, mientras el Presidente prepara la presentación de un nuevo paquete de leyes.
El entorno libertario coincide en que el resultado electoral fue una validación del rumbo, pero también una señal para ajustar el funcionamiento interno del poder.