MILEI AVANZA CON UN REACOMODO EN EL GABINETE TRAS LAS ELECCIONES.

El mandatario confirmó que, una vez que concluya la elección del próximo domingo, dará inicio a una reconfiguración ministerial que incluirá la salida de aquellos ministros que fueron candidatos —como Manuel Adorni, Patricia Bullrich y Luis Petrí—, y otros ajustes con miras a la segunda mitad de su gestión.
El objetivo, explicó Milei, es conformar un “entramado funcional” que agilice la implementación de las reformas que definió como prioritarias, y para ello adelantó que evaluará los nombres, roles y estructura del equipo de gobierno a partir de la noche de las elecciones.
¿Qué busca con este cambio?
- Consolidar lo que el Gobierno interpreta como un respaldo electoral mediante ajustes en su equipo.
- Reforzar el ritmo de las reformas económicas y políticas tras el tramo inicial del mandato.
- Marcos de gobernabilidad: reforzar la disciplina del gabinete, la coordinación entre carteras y la visibilidad de los ministros.
- Adaptar la gestión al escenario pos-elecciones, donde la legitimidad política se convierte en presión adicional para mostrar resultados.
Riesgos y desafíos latentes
- La reorganización ministerial puede generar roces internos, más aún si algunos espacios del oficialismo consideran que no les dieron protagonismo.
- Si el resultado electoral no es tan favorable como se anticipa, los cambios podrían interpretarse como reacción defensiva, más que como consolidación de políticas.
- La comunicación del ajuste debe evitar la percepción de “remodelación electoral” pura, sin sustancia política real.
- La gestión de las reformas de “segunda generación” exigirá el apoyo del Poder Legislativo y de actores clave del sistema político, algo que dependerá también del resultado de los comicios.