KICILLOF CONTRA LOS AHORRISTAS: MIENTRAS NACIÓN BAJA IMPUESTOS, LA PROVINCIA APRIETA CON MÁS CONTROLES.

1. Contrastes que no pasan desapercibidos
Mientras el Gobierno Nacional de Javier Milei impulsa un plan de blanqueo voluntario y baja de impuestos para atraer los “dólares del colchón” al sistema financiero, el gobernador Axel Kicillof ratificó que la provincia de Buenos Aires mantendrá —e incluso reforzará— los controles fiscales sobre los contribuyentes.
2. Qué implica el anuncio bonaerense
A través de ARBA (Agencia de Recaudación de la Provincia), el gobierno de Kicillof confirmó que seguirá cruzando datos financieros, patrimoniales e inmobiliarios de los ciudadanos para detectar supuestas inconsistencias y aplicar impuestos locales como Ingresos Brutos, Sellos o el Impuesto Inmobiliario.
3. El contraste con Nación
Mientras Nación busca generar confianza para formalizar ahorros y reducir la presión tributaria, la Provincia opta por una lógica punitiva, que muchos consideran invasiva y desincentivadora de la inversión privada.
4. Un enfoque recaudatorio clásico
La gestión Kicillof prioriza sostener la recaudación local ante la caída de transferencias nacionales. Sin embargo, analistas y tributaristas advierten que este modelo castiga al contribuyente cumplidor, refuerza el “Estado fiscalista” y va en contra del clima de alivio tributario que propone la administración Milei.
5. Críticas del sector privado
Empresarios y contadores señalan que la Provincia actúa como si desconfiara de todos por defecto, generando incertidumbre y riesgo de doble imposición. Además, destacan que los controles son asimétricos, porque no se aplican con igual rigor a sectores protegidos o cercanos al poder.
6. El mensaje político
Para muchos, la postura de Kicillof muestra una visión opuesta al proyecto libertario: donde Milei busca liberar al ciudadano del peso estatal, Kicillof insiste en aumentar la intervención y la vigilancia fiscal como herramienta de gobierno.
7. Conclusión
Mientras Nación propone reparar la relación con el ahorrista y reducir impuestos, la Provincia redobla controles. El resultado: dos modelos económicos en choque abierto, con impacto directo sobre la confianza, la inversión y la libertad financiera de los bonaerenses.