¿Perdés el olfato? Podría ser una señal temprana de deterioro cognitivo, según la ciencia.
Un nuevo estudio científico reveló que la pérdida del olfato podría ser uno de los primeros indicios de deterioro cognitivo leve, una condición que puede anticipar el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer. El hallazgo abre la puerta a pruebas simples y no invasivas para la detección temprana.
¿En qué consiste el test?
Investigadores de la Universidad de Pensilvania desarrollaron un test de identificación de olores, llamado UPSIT (University of Pennsylvania Smell Identification Test), que evalúa la capacidad de una persona para reconocer distintos aromas. Los resultados anómalos pueden ser un marcador temprano de daño neurológico.
¿Por qué el olfato?
El sentido del olfato está directamente vinculado con zonas cerebrales que se ven afectadas en etapas iniciales del deterioro cognitivo, como el hipocampo y la corteza entorrinal. Por eso, una disminución olfativa podría anticipar otros síntomas, incluso antes de que aparezcan fallas de memoria o atención.
¿Qué ventajas tiene?
- Es un test económico, fácil de aplicar y no invasivo.
- Puede utilizarse como herramienta de cribado en adultos mayores o personas con antecedentes familiares.
- Permite intervenir antes con tratamientos o cambios en el estilo de vida.
Los expertos subrayan que no toda pérdida de olfato indica una enfermedad cognitiva, pero sí es una señal de alerta si se da de forma repentina o sin causas claras (como una infección o trauma).